viernes, 8 de abril de 2011

Adelaida Rodríguez I

Tras recordar el pasado, nos adentramos en una ganadería que es presente y futuro del campo bravo charro, Adelaida Rodríguez.Su trabajo y selección la han colocado en la cima de la calidad y bravura, aunque su lugar en el escalafón ganadero aún tiene que alcanzar cotas más elevadas por méritos propios.


La finca el Zarzosillo de Abajo, en plena falda de la Peña de Francia es un paraíso natural por donde corren los regatos Zarzoso y Zarzosillo que confluyen en lo que es el nacimiento del que es junto al Huebra, el río más ganadero de Salamanca, el río Yeltes. Ambos vienen a ser algo así como el Tigris y el Eúfrates de Mesopotamia, en este caso del Campo Bravo Charro.




El ganadero Fernando García es el encargado de abanderar la divisa celeste y caña que lleva el nombre de su madre, Adelaida Rodríguez, hija a su vez de Laurentino Rodríguez y nieta de Lorenzo Rodríguez de Espioja.
Con semejante reata es imposible fallar como se dice en el campo y si a esto le sumamos el trabajo y las vacas de mejor nota que quedaban de Lisardo la mezcla se antoja perfecta.



Siguiendo el sabio consejo de su abuelo que rezaba, que si un día querían ser ganaderos lo fueran con lo mejor y más bravo que existía, la rama de Lisardo Sánchez de origen Atanasio, adquirió a Benjamín Vicente, "el Rubio de Golpejas", un centenar y medio de lisardas, las de mejor nota, en ese momento cubiertas por un charolés, con la intención de que nadie las comprara ya que si Lisardín se recuperaba, volvería a repescar su herencia brava.






Tras 20 años en sus manos, la ganadería que pasta en el término de El Cabaco cuenta con 200 madres (50 vacas más de las que compró, lo cual habla de su cuidadosa y exigente selección) 
y 14 sementales, con lo que se pueden abrir mucho las familias.






Terminamos este primer capítulo sobre la ganadería con 2 fotos curiosas, la primera es de un becerro llamando a su madre, su expresión de bravo queda patente nada más nacer. 
Curiosamente su capa es tostada, esta se irá haciendo más negra con el paso del tiempo pues esta es la predominante en la casa aunque no es la única como más adelante veremos.
Y la 2ª foto es de una de las joyas de Adelaida, una vaca de 22 años con el hierro de Lisardo
(hierro ahora en posesión de Gloria García Montero-Ríos tras pasar por las manos del propietario de Guadalmena). La leyenda de los lisardos sigue viva ...




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